Fuente: www.redaccionmedica.com
Esta mañana se ha llevado a cabo el XII Seminario de Periodistas ‘Curar y Cuidar en Oncología’, organizado por la Sociedad Española de Oncología Médica (SEOM) y la biofarmacéutica MSD, donde además de haber analizado el marco regulatorio sobre la práctica de biomarcadores se han presentado cifras que demuestran que España es el país europeo con más ensayos clínicos en fases oncológicas tempranas, sin embargo, no existe un procedimiento estandarizado específico para la evaluación, implementación de la medicina de precisión.
La primera mesa del seminario fue abierta por Violeta Tahuilan, directora del Área de Investigación Clínica en Oncología (Global Clinical Trial Operations, GCTO) en MSD España, quien ha analizado la ‘Perspectiva de la contribución de los biomarcadores en la investigación e innovación farmacéuticas’, en esta instancia Tahuilan ha señalado que ha habido un crecimiento exponencial en el área de ensayos clínicos en oncología siendo “España el país europeo con más ensayos clínicos en fases tempranas, en fases 1 y 2 donde están los medicamentos más revolucionario y los ensayos clínicos más complejos”. Tahulian ha explicado que desde el año 2004 al año 2018 ha habido un incremento de un 86 por ciento de ensayos clínicos en esta área.
Sobre el aporte de los biomarcadores para medicina de precisión en cáncer y para futuras decisiones terapéuticas, el presidente de SEOM, Álvaro Rodríguez Lescure, ha señalado que “la identificación de los biomarcadores ha sido una de las grandes revoluciones de la Oncología en los últimos 10-15 años y su número está aumentando rápidamente. Actualmente, son una herramienta fundamental en la toma de decisiones en pacientes oncológicos concretos pero en España no tenemos un circuito estandarizado para la implantación del uso de biomarcadores y necesitamos tener un sistema ágil para poder determinarlos en la práctica clínica”, ha explicado Rodríguez Lescure.
Para el efectivo funcionamiento de la medicina de precisión Rodríguez Lescure explica que “se requiere una estrecha colaboración intersectorial de diferentes actores, incluyendo las sociedades científicas y con un papel clave del Ministerio de Sanidad y las Comunidades Autónomas (CCAA) y planes estratégicos nacionales que fomenten su implementación para garantizar el acceso en todo el territorio nacional”, ha expresado el presidente de SEOM.
Félix del Valle, director de la Unidad de Oncología de MSD en España, ha mantenido la línea de Rodríguez Lescure sobre las colaboraciones y ha destacado la importancia de los biomarcadores como pieza clave para el desarrollo pleno de la medicina personalizada en pacientes.
Desde los pacientes, la presidenta del Grupo Español de Pacientes con Cáncer (Gepac), Begoña Barragán, ha destacado que “a pesar de la importancia que tienen los biomarcadores a la hora de determinar un tratamiento oncológico, los pacientes en general no tienen información suficiente y, por ello, solo si el oncólogo propone utilizarlos pueden decidir. En las asociaciones de pacientes tenemos más información y, por tanto, la responsabilidad de transmitirla, tanto a pacientes como público en general, con materiales informativos, formación específica y campañas de divulgación”, ha sentenciado.
Ante la demanda de hacer un ejercicio multidisciplinar para cambiar el ‘paradigma’ de la medicina de precisión, el seminario contó con un grupo de ponentes que han analizado la importancia de los biomarcadores desde distintas especialidades y ámbitos.
Antonio González, vocal de junta directiva de SEOM y jefe del servicio de Oncología Médica de la Clínica Universidad de Navarra en Madrid ha señalado que la incorporación de la medicina personalizada o de precisión a través de biomarcadores “nos permite seleccionar el tratamiento potencialmente más efectivo para el paciente, con el consiguiente impacto en el paciente individual y ahorro de recursos para el sistema. Para el oncólogo clínico y para el sistema sanitario, ya no debería ser una opción tratar a un paciente sin un informe de los biomarcadores validados en su patología”, ha explicado González.
Por su parte, Federico Rojo, jefe de servicio de Anatomía Patológica del Hospital Universitario Fundación Jiménez Díaz (Madrid), ha querido destacar que “la medicina de precisión es una realidad: las características moleculares del tumor y del paciente determinan qué tratamiento debe aplicarse en cada caso para garantizar la máxima eficacia. Dentro de esta medicina de precisión emerge este diagnóstico de precisión para dar respuesta a la selección de pacientes guiada o dirigida por biomarcadores que se basan, precisamente, en esa caracterización de las alteraciones moleculares presentes en la enfermedad”. Por todo ello, ha destacado la necesidad de definir un plan o una estrategia nacional en medicina de precisión “que incluya los recursos necesarios para este diagnóstico molecular o de precisión y articule los mecanismos necesarios para garantizar el acceso a toda la población, independientemente del territorio”, ha agregado.
Ana Cristina Cercós, miembro del Grupo de Farmacia Oncológica (Gedefo) de la Sociedad Española de Farmacia Hospitalaria (SEFH); por su parte, ha señalado que “hace ya tres años se ha establecido un posicionamiento conjunto proponiendo la creación de una estrategia nacional consensuada para el desarrollo de la medicina de precisión en nuestro país y facilitar su implantación en la práctica asistencial de forma equitativa y con garantías de calidad, eficiencia y jurídica”, ha agregado Cercós.